La mamá de hoy no le cierra las puertas a la tecnología. Por el contrario, la ha convertido en una excelente aliada: la mayoría de ellas usa un celular, tiene una cuenta en Facebook y –aunque en menor número– interactúa en Twitter.
La mamá de hoy no le cierra las puertas a la tecnología. Por el contrario, la ha convertido en una excelente aliada: la mayoría de ellas usa un celular, tiene una cuenta en Facebook y –aunque en menor número– interactúa en Twitter.