‘Excalibur’, el perro de enfermera española con ébola, finalmente fue sacrificado pese al pedido de sus dueños y de activistas defensores de los animales, quienes rechazaban el fallo judicial que ordenaba el exterminio de la mascota ya que no se confirmó si era portador del mortal virus.
Las redes sociales en España se unieron al pedido del esposo de la enfermera que contrajo ébola cuando atendía a misioneros infectados en África. Él pide que su perro Excalibur no sea sacrificado, pues se teme que la mascota también sea portadora del mortal virus.