Luego de que Enrique Peña Nieto, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), fuera declarado hoy en definitiva presidente electo de México, Andrés Manuel López Obrador anunció que no acepta la decisión del Tribunal Electoral de declarar válidas las elecciones del 1 de julio y llamó a la desobediencia civil “por la vía pacífica”.