Al Gore

El cambio climático es considerado un problema (con diferentes niveles de gravedad) por la mayoría de peruanos. Según GfK, solo un 5% no lo considera como tal (9% entre los de más bajo ingreso). De hecho, hay una disposición favorable para el cuidado del medio ambiente. Prácticas que heredamos de nuestras épocas de escasez, como el ahorro de agua en el hogar y el consumo de luz, aparecen como muy frecuentes en el día a día (74% y 72%, respectivamente). En cambio, el reciclaje y la adquisición de productos que no dañen al ambiente son aún costumbres de unos pocos (34% y 21%, respectivamente). La cumbre mundial sobre el cambio climático (COP20), que albergamos en estos días, es una estupenda ocasión para calar en la sensibilidad ciudadana sobre el cuidado de nuestro hábitat. Aunque, para un 21% de peruanos, el aporte de esta convención será poco o nulo, la participación de figuras mediáticas –desde Al Gore hasta Leonardo DiCaprio– generará atracción sobre una problemática que no es cubierta con eficiencia por los medios nacionales. De hecho, un 54% declara no haber visto información respectiva a esta cumbre mundial. La clave es, como siempre, vincular el debate de especialistas con la vida cotidiana. En ese sentido, nuestra vocación es de la boca para afuera. Basta mirar nuestras urbes contaminadas, la impunidad medioambiental de nuestras inversiones y la insostenibilidad “verde” de nuestro “modelo de desarrollo” para comprender que la tarea es larga. Más allá de discursos bienintencionados (que en el mejor de los casos contentan a las ONG), no hay liderazgo político que conduzca esta agenda al peruano promedio. Si no se cala en el comportamiento individual, los acuerdos y las políticas no serán funcionales.

El ex vicepresidente de los Estados Unidos Al Gore participará en la Conferencia de las Partes de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP20), que se desarrollará en Lima del 1 al 12 de diciembre próximo.

Varias celebridades se unieron a la marcha que se realiza este domingo en las ciudades más importantes del mundo en una movilización contra el cambio climático.

La Casa Blanca defendió hoy la necesidad de registrar las llamadas telefónicas de los ciudadanos de Estados Unidos, por considerarlo “una herramienta crítica” en el combate al terrorismo.

Ariel Segal, Opina.21 arielsegal@hotmail.com

Talia Schvartzman,Opina.21 Nuestra alimentación tiene un impacto en el medio ambiente, y una de las formas de medirlo es a través de la huella hídrica, que mide el consumo de agua requerido para la producción y distribución de los alimentos. Si vemos estos datos, la carne de res es un alimento altamente antiecológico ya que 1 kilo de carne requiere más de 15,000 litros de agua, mientras que uno de plátano requiere 850 litros. Los alarmantes efectos del cambio climático nos han hecho dar un paso al costado y revisar ciertas actitudes que impactan nuestro propio medio. No puedo negar que es una “verdad incómoda” como dice Al Gore. Y una de las recomendaciones para con el ambiente es reducir el consumo en general. En este caso, es recomendable reducir el consumo de carnes, especialmente la de res, no necesariamente erradicarla de la dieta. Por otro lado, la carne de res es un alimento con un alto contenido de grasa, especialmente grasa saturada, grasa trans y colesterol, aunque también es una fuente importante de hierro y vitamina B12. Personas con alto ácido úrico o insuficiencias renales o cardiovasculares deben consumirla de forma muy limitada. Reduzcamos su consumo para cuidar nuestra salud y la del planeta.