Papa Francisco en La Habana: Cubanos están bendecidos y agradecidos ante visita de Sumo Pontífice

La Habana parece querer retomar su ritmo. Miles de personas se alejan de la habanera Plaza de la Revolución, transpiran. Van armadas de sombrillas, sombreros, gorras, todo lo que sirva para tapar los rayos de sol que logran pasar la gran nube. Caminan solos o en grupos. Tienen todas las edades. Vienen de toda Cuba y de cualquier parte del mundo. Las une una fe.

Han estado desde la madrugada del pasado domingo para participar en la primera homilía del papa Francisco en su visita oficial a Cuba. Han venido a ser bendecidos por él, sea cual sea su creencia, y a agradecerle su papel en el restablecimiento de relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos, anunciado en diciembre último.

No importan días de interrupciones viales, cierres de locales culturales a medianoche, prohibiciones de venta de bebidas alcohólicas y una vigilancia policial reforzada.

“He venido a acompañarlo en su misión en Cuba”, dice Nancy Rondón, una habanera de 51 años de edad, que se confiesa atea y partidaria de la revolución cubana. Nancy considera que Francisco, como le llaman popularmente, representa mucho para Cuba y para los cubanos por su “mediación en el diferendo con EE.UU.”.

El rol de Francisco en la normalización de las relaciones entre ambos países ha sido reconocido públicamente.

William Hernández luce emocionado aún. “Francisco me pasó por el lado. Soy un privilegiado”, dice el guía turístico de 29 años que ha participado en las visitas de Juan Pablo II (1998) y Benedicto XVI (2012). He venido a recibir bendición para mí, para mi familia, y porque ya hemos visto cómo estas visitas abren las puertas al mundo”, cuenta mientras está al frente de un grupo de costarricenses.

Uno de los peregrinos puertorriqueños es Wilfred Labiosa, quien considera esta “una visita histórica no solo para Cuba, sino para el Caribe. Francisco dijo palabras muy positivas para las relaciones EE.UU. y Cuba.
Hace falta que los líderes cubanos escuchen bien el mensaje del Papa”.

Con iguales motivaciones, llega a la Plaza una habanera que prefiere el anonimato. “Jesús es para todos”, afirma. Practica la santería, una religión africana que se sincretizó con el credo católico en tiempos de la colonia española hasta hoy.

Para casarse por la Iglesia Católica, Alexander Iglesias se hizo bautizar a los 33 años. Diez años más tarde es un santero “reconocido”. Vestido todo de blanco, sin una mancha, estaba en la liturgia. “Este país es la mezcla perfecta, también entre las religiones, y el Papa es un hijo de Dios”, dice.

A sus 109 años, Emilia Georgina, quien asegura ser católica “pura” desde pequeña, asistió en su silla de ruedas, acompañada de parte de su familia, a la que ha educado “en la fe en Dios”.

De la misma manera se define Sergio Gómez, con apenas 91 años de diferencia. Sergio, quien pertenece a la Comunidad Santo Egidio, cree que es “un buen momento para la Iglesia en el país porque más jóvenes se acercarán. Será el renacimiento y una buena oportunidad para el país cuando se normalicen las relaciones con EE.UU.”.

Un tema que está pendiente y no es visible en la agenda pública es el del reconocimiento de las familias LGBTI, sobre el que Francisco ha tenido pronunciamientos recientes en contra.

En tanto, Yasmín Silva, líder del proyecto anticapitalista y marxista Fundación Cubana por los Derechos LGBTI y Afro-ALCU (Arcoíris Libre de Cuba), comenta a Perú21 que tuvieron “un debate interno sobre nuestra posición con esta visita, Francisco ha hecho declaraciones muy importantes sobre la pobreza y la desigualdad, que marcan cambios en la Iglesia y tienen que ver con nuestra ideología”.

Sin embargo, reconoce que ha sido “problemático y doloroso que no reconozca familias LGBTI, en que insista en el matrimonio solo entre hombre y mujer, cuando se trata de un contrato entre personas libres”. Finalmente, decidieron no pedirle un encuentro, ya que “no valía la pena porque este es un asunto de cubanas y cubanos”, recalcó la activista LGBTI.

TENGA EN CUENTA

• En Cuba, según el Programa Latinoamericano de Estudios Sociorreligiosos (Prolades), la población católica representa el 25%, y quienes siguen cultos de origen africano, 22%.

• La tercera visita de un Papa a la isla caribeña coincide con medidas unilaterales estadounidenses, que flexibilizan sus relaciones económicas con Cuba, a la que mantiene bajo el embargo.

• El papa Francisco se reunió con Fidel Castro y le regaló un CD con la voz de Amando Llorente, profesor del ex presidente.

• Wilfred Labiosa, reconocido activista pro derechos LGBTI puertorriqueño, asegura que este tema será tratado por Su Santidad en EE.UU., su próxima parada, durante la Reunión de Familias, en la que se incluyen representantes de familias diversas.

Por Marta María Ramírez – Reportera en La Habana