Los cuerpos del alpinista estadounidense Alex Lowe y de su camarógrafo fueron encontrados encapsulados en un glaciar de la cordillera del Himalaya, 16 años después de su desaparición tras una avalancha.
La semana pasada dos escaladores descubrieron los restos de dos hombres “que todavía están encapsulados en el hielo pero que están comenzando a emerger de un glaciar”, informó la fundación que lleva el nombre de Lowe.
Alex Lowe, de 40 años, y su camarógrafo, David Bridges, de 29, ambos estadounidenses, fueron arrastrados por una avalancha durante su ascensión al Shisha Pangma, una cumbre de 8.027 metros ubicada en la parte china del Himalaya.
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Ambos montañistas estaban intentado ser los primeros estadounidenses en descender de la montaña en esquí.
Conrad Anker, que sobrevivió a la avalancha y se casó con la viuda de Alex Lowe y adoptó a sus tres hijos, dijo que este hallazgo es “un alivio y permite dar vuelta la página”.
La familia va a viajar a la montaña para recuperar el cuerpo. Esta cumbre, que forma parte del Himalaya, es una de las únicas 14 montañas en todo el mundo que superan los 8,000 metros de altitud.
“Los padres de Alex están agradecidos de saber que encontraron el cuerpo de su hijo y que Conrad, los niños y yo vamos a hacer un peregrinaje a Shisha Pangma”, dijo la viuda, Jennifer Lowe-Anker, en un comunicado.
La pareja reconstituida se encontraba en Nepal cuando se enteró de la noticia. Habían viajado al país para supervisar la construcción de un edificio para el Centro de Escalada Khumbu, una escuela para formar a nepalíes que trabajan en la montaña.
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Este centro fue creado en 2003 para honrar la memoria de Lowe, un montañista que coronó el Everest dos veces y que tenía fuertes vínculos con Nepal. Antes de su muerte era reconocido como uno de los mejores alpinistas del momento.
Tras una incursión en esquí al Aconcagua, la cumbre más alta de Sudamérica, comenzó a ser conocido como “el pulmón con piernas”.
Los alpinistas David Goettler y Ueli Steck descubrieron los restos cuando preparaban su ascensión al Shisha Pangma.
Esta cumbre, que estuvo cerrada a los occidentales hasta 1978, es considerada como una de las montañas sobre los 8,000 metros que es más fácil de ascender, y muchas empresas que organizan expediciones recomiendan entrenarse en ella.
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