La Policía del Cusco, con la ayuda de la empresa privada, rescató ayer a los 51 turistas chilenos, así como a otros 150 viajeros peruanos y extranjeros, que estaban varados en Aguas Calientes, luego de que el último lunes colapsara el puente Aobamba, ubicado en el distrito de Santa Teresa, el cual servía como vía alterna para acceder a la ciudadela inca de Machu Picchu.