No se dan por vencidos. Tras su frustrado intento, hace dos semanas, de aprobar una resolución para exonerar del pago de tributos los 7 mil soles que reciben por gastos de representación, los congresistas han acordado no morir en el intento y cerrar filas en defensa de su “legítimo derecho” a contar con los recursos necesarios para realizar su labor de representación que, en muchos casos, no es otra cosa que un precalentamiento para la campaña reeleccionista de 2016.