Tal como se adelantara la semana pasada, Irán duplicó el número de máquinas de enriquecimiento de uranio en una instalación subterránea fortificada, según confirmó hoy el organismo de supervisión nuclear de la ONU, lo que mostraría el desafío de Teherán a la presión occidental y a la amenaza de ataque por parte de Israel si no desmantela su programa nuclear.