Jaime Salomón Villalobos inició sus actividades ilícitas en la década de los 80. En ese entonces fue atrapado debido a que ya era cabecilla de una mafia de clonadores. Sin embargo, la falta de una adecuada legislación hizo que rápidamente volviera a las calles, hecho que podría repetirse, según advirtieron los agentes a cargo de la investigación.