Un nuevo motín en el penal de máxima seguridad de Challapalca, en Tacna, ha puesto en evidencia la inseguridad de los penales del país y la deficiente política carcelaria. La noche del martes, un grupo de delincuentes de alta peligrosidad se amotinó y, tras robar las armas de sus custodios, tomó de rehenes a 15 trabajadores, a quienes amenazó con matar si no se mejoraban sus condiciones de encierro.