DAMASCO (AFP).– Los rebeldes sirios se apoderaron de un poblado fronterizo con Turquía después de encarnizados combates contra las fuerzas del régimen en los que murieron 40 soldados.
Un día después del atentado que acabó con la cúpula militar del régimen de Bashar al Assad, siguen las dudas sobre el paradero del presidente sirio, quien desde el miércoles no ha hecho declaraciones ni ha aparecido en público.