El técnico del Bayern Munich, Josep Guardiola, manifestó su enfado con la directiva del Barcelona, que habría querido indisponerlo con el DT ‘culé’, Tito Vilanova. “Me fui a seis mil kilómetros y solo le pedí al presidente (Sandro Rosell) que me dejaran tranquilo. Pero no han cumplido su palabra, no lo han hecho”, dijo ‘Pep’ en una conferencia que ofreció en Trentino.