WASHINGTON/DAMASCO (Agencias).– El ataque de Estados Unidos a Siria se da por descontado. El presidente de Estados Unidos Barack Obama todavía no ha tomado la decisión de cuándo ejecutarlo, pero tiene en claro que no puede quedar impune el ataque con armas químicas que perpetró el régimen de Bashar al Assad, el miércoles de la semana pasada, contra rebeldes y población civil cerca a Damasco.