Cousiño-Macul

MARIDAJE SUREÑO Arturo Cousiño, dueño de la bodega chilena Cousiño-Macul –que lleva seis generaciones produciendo vinos–, estuvo en Lima para presentar sus mejores mostos. Y, botellas en mano, los ‘enfrentó’ con los más clásicos platillos peruanos para demostrar que, en la mesa, nuestros países también pueden ir de la mano. La reunión fue en el restaurante Brujas de Cachiche y, allí, para el cebiche propuso un Sauvignon Gris. Mal no estuvo, pero hubiera quedado mejor con un tiradito. Superior estuvo el ensamble entre la causa de cangrejo y el Chardonay Antiguas Reservas 2011, que tiene un paso por madera. Pero lo mejor de la reunión fue el gran ensamblaje que se produjo entre el lomo saltado y el Finis Terrae 2008, un blend de Cabernet Sauvignon, Merlot y Syrah. Los vinos de Cousiño-Macul están en todos los supermercados.