El fiscal supremo de Control Interno, Carlos Ramos Heredia, fue víctima de la interceptación de su correo electrónico y nada menos que por un trabajador de la Gerencia de Imagen de su misa institución.
El fiscal supremo de Control Interno, Carlos Ramos Heredia, fue víctima de la interceptación de su correo electrónico y nada menos que por un trabajador de la Gerencia de Imagen de su misa institución.