Tras la derrota ante UTC, Ángel Comizzo, entrenador de Universitario, recriminó duramente a su defensa por no obedecer sus indicaciones. En el entretiempo pidió a Christian Dávila, Fernando Alloco, John Galliquio y Alexis Gómez que mantuvieran el orden, pues estaba seguro que su equipo podía ganar. “Les advertí, pero no me hicieron caso. No hay orden, no aprendemos, no hacemos caso”, señaló el técnico argentino.