Por Jessica Alva Piedra (jalva@peru21.com) Qué duda cabe que Brasil 2014 ha captado la atención, literalmente, de todo el mundo. El avance de las grandes potencias del fútbol y las hazañas de los equipos “chicos” nos han sumergido en la emoción de grandes jugadas y, a la vez, en la resignación de no ver al Perú medirse contra otras selecciones en la máxima fiesta del balompié.