Un joven ruso que vivió cerca de 16 años con sus padres en un bosque de Siberia, lejos de la civilización, se presentó ante las autoridades tras ser abandonado por sus padres.
Al menos 248 embriones humanos fueron hallados en un bosque de la región rusa de Sverdlovsk, que procedían de cuatro hospitales, informó el portavoz del Ministerio de Interior, Valeri Gorélij.