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Boom latinoamericano

EFE/Bogotá Mario Vargas Llosa descartó hoy en Colombia que pueda estallar un nuevo “boom latinoamericano”, porque aunque constantemente aparecen buenos escritores, ya no despiertan la misma sorpresa de aquella generación de la década de los 70.

“La literatura es fuego”, escribió alguna vez Mario Vargas Llosa y no le faltó razón. La creación de un poema, de un cuento, de un ensayo, de una novela, le exige al escritor un compromiso –primero con él mismo y su escritura; luego, con el lector– que implica una entrega casi mística a su materia literaria.

01/12/13 |

Obra maestra

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“ La literatura es fuego”, escribió alguna vez Mario Vargas Llosa y no le faltó razón. La creación de un poema, de un cuento, de un ensayo, de una novela, le exige al escritor un compromiso –primero con él mismo y su escritura; luego, con el lector– que implica una entrega casi mística a su materia literaria.

Pedro Salinas, El Ojo de Mordor La leí por primera vez, como muchos de mi generación, cuando estaba en el colegio. No recuerdo si fue antes o después de Los Cachorros, porque una novela me llevó a la otra. Pero fue por ahí, como a los doce o trece años, que descubrí a Mario Vargas Llosa. La releí con mayor interés, recuerdo, cuando mi padre, quien tenía un hermano militar que había sido director del Leoncio Prado, me advertía que si no mejoraban mis notas iba a hablar con el Cholo, mi tío, para trasladarme a ese lugar, sinónimo de encierro y de régimen carcelario y de martirio escolar. Y hasta de reformatorio, si cabe, donde la vida era como una jungla y el verticalismo autoritario y jerárquico era la única ley.

MÉXICO (EFE).– El escritor mexicano Carlos Fuentes, una de las principales plumas del denominado ‘boom latinoamericano’, murió ayer en la capital de México, a los 83 años, dejando un gran hueco en las letras hispanas que será difícil de llenar.

“En la madrugada, aprovechándose de la recepción, un ministro había dado un golpe de estado y el presidente había sido obligado a dimitir.” Así fue como las aspiraciones de don Fernando llegaron a su fin en El banquete, uno de los tantos relatos de Julio Ramón Ribeyro, el gran cuentista peruano que abandonó el mundo de las letras hace exactamente 17 años.