Después de la cama, la ducha debe de ser el segundo lugar preferido para el sexo. Es un sitio natural y propicio para las actividades amorosas en pareja. Es decir, ¡ambos ya están sin ropa! Solo se necesita un poco de tiempo y tener en cuenta ciertas precauciones que veremos a continuación.
Después de la cama, la ducha debe de ser el segundo lugar preferido para el sexo. Es un sitio natural y propicio para las actividades amorosas en pareja. Es decir, ¡ambos ya están sin ropa! Solo se necesita un poco de tiempo y tener en cuenta ciertas precauciones que veremos a continuación.
Rosa (32) siente que el sexo con su pareja se ha vuelto aburrido. Ama a su novio, José (34), pero cree que el fuego sobre la cama se ha apagado hace un buen rato. “Ya no es como antes. Parece como si ahora lo hiciéramos por compromiso. Llevamos cuatro años juntos”, dice Rosa. En efecto, es normal que las relaciones prolongadas atraviesen fases de “enfriamiento” erótico, en las que el sexo no resulta tan emocionante ni divertido como lo fue alguna vez. En muchos casos, esta grieta puede deteriorar la relación poco a poco.
Rosa (32) siente que el sexo con su pareja se ha vuelto aburrido. Ama a su novio, José (34), pero cree que el fuego sobre la cama se ha apagado hace un buen rato. “Ya no es como antes. Parece como si ahora lo hiciéramos por compromiso. Llevamos cuatro años juntos”, dice Rosa. En efecto, es normal que las relaciones prolongadas atraviesen fases de “enfriamiento” erótico, en las que el sexo no resulta tan emocionante ni divertido como lo fue alguna vez. En muchos casos, esta grieta puede deteriorar la relación poco a poco.
“El sexo, sea lo que sea, es una habilidad atlética. Cuanto más lo practiques, más podrás hacerlo, más querrás hacerlo, más lo disfrutarás, te agotará menos”. Robert A. Heinlein, escritor estadounidense.
“El sexo, sea lo que sea, es una habilidad atlética. Cuanto más lo practiques, más podrás hacerlo, más querrás hacerlo, más lo disfrutarás, te agotará menos”. Robert A. Heinlein, escritor estadounidense.