El inicio de las obras del Tren Eléctrico ha generado caos en las calles de Surco. Los usuarios del transporte privado y los comerciantes de la avenida Tomás Marsano –desde el óvalo de Higuereta hasta la avenida Surco– señalan que estos trabajos perjudican los negocios y generan gran congestión vial.
El transporte privado es desviado hacia rutas alternas, mientras que los vehículos públicos –buses, custers y combis– siguen transitando sus rutas con normalidad. Los comerciantes de la zona recibieron credenciales para poder transitar por las cuadras en las que se realizan trabajos.
Las obras de refacción durarán por lo menos seis meses. “No estamos de acuerdo. Esta es una zona comercial, no es posible que la cierren así. Ahora tenemos que salir varias cuadras para que nuestros clientes no se vayan. ¿Cómo cubrimos los gastos si no hay trabajo?”, dijo un mécanico de la zona.