“La medalla que hoy luzco es un regalo para el Perú”

Alexandra Grande es como su apellido. No hay reto que la detenga. Y, cuando se enfunda el quimono, está dispuesta a hacer sonreír al Perú con sus medallas y sus éxitos. Eso es lo que hizo en el Panamericano de Karate que se realizó hace unos días en Curazao, donde ganó la presea de oro en katá categoría 61 kilos. Lo que sigue es una plática con ella antes de una dura jornada de entrenamiento. Uno de esos tantos días en que deja el sudor en el tatami buscando siempre mejorar su talento.

Cuéntanos el recorrido que tuviste para quedarte con la medalla de oro.
Primero enfrenté a una brasileña y le gané 8-3. Después me tocó una chilena, a la que derroté por 2-1; le siguió una canadiense en semifinales y gané 2-1. Finalmente, me tocó una colombiana en la final y pude quedarme con la medalla tras ganar 3-0. Fue muy dura la competencia, pero la medalla valió la pena.

¿Pensaste en algún momento que se te escapaba la presea de oro?
Sí, y fue empezando la competencia, cuando enfrenté a la brasileña. Quizás estaba muy confiada, pero a falta de un minuto perdía 3-0. Me metí de lleno a la pelea y gané. En el karate no vale desconcentrarse un solo minuto.

¿Cuál es la sensación que tienes al ganar una medalla y estar en el podio?
Es algo increíble. Yo tomo la bandera del Perú, la beso y canto el himno nacional como nunca. Sé que mis logros ponen contento a todo mi país, y ese es el primer premio a mi esfuerzo.

¿Cómo definirías tu presente en el karate con una sola palabra?
Actitud. En esa palabra encierro mis ganas de derrotar todo lo que se me ponga enfrente. No importa cuan fuerte sea el reto.

No es la primera vez que obtienes un Campeonato Panamericano…
No, también lo gané en 2008, en Argentina. Además, logré el subcampeonato del torneo anterior en Venezuela. Sé que esto solo es el inicio y que lograré más cosas.

¿Alguna vez se te pasó la mano con alguien?
Sí, una vez. En un tope (competencia previa a una selección) hice un giro y golpeé con el talón del pie a una chica. Le rompí la nariz y la hice sangrar. Pese a que fue casual, me asusté mucho.

¿Llevas algún amuleto a los torneos?
Una medalla de San Judas Tadeo que me dieron mis padres. La llevo a todos los torneos donde voy. Siempre me acompaña y en ella veo a mis papás.

¿Usaste el karate para defenderte?
Sí, dos veces. Una cerca de mi casa: dos chicos intentaron robarme, a uno le di una patada allá abajo. En la segunda le robaron el celular a mi hermana y el “choro’ se metió a un auto, pero alcancé a darle un golpe en la espalda.

¿Qué torneos se vienen para ti?
El Sudamericano de Mayores; luego, los Bolivarianos y el Mundial Juvenil en Marruecos. Espero tener el apoyo del IPD y de la empresa privada.