Destinos. Inka Naani, una experiencia imperdible

29 oct (Peru21.com)

El trayecto Inka Naani, entre Áncash y Huánuco, forma parte del valioso Qhapaq Ñano Camino Inca. Ahora cuenta con señalización, letrinas y código de ética para los pobladores y los turistas.

Uno de los puntos del país donde se conjugan la monumentalidad de las antiguas edificaciones incas, los paisajes naturales más imponentes de los Andes y las tradiciones de vida de las comunidades más marginadas. Eso es el Inka Naani, un trayecto de 140 kilómetros que forma parte del Qhapaq Ñan o Gran Camino Inca y que servía como sistema vial en el Tahuantinsuyo.

La ruta comprende el tramo desde el centro poblado Castillo, en la provincia de Huari (Áncash), hasta la comunidad de Tambo Chico, en la provincia de Huamalíes (Huánuco), y se ha convertido en una especie de espacio público utilizado como tránsito obligado entre las comunidades.

El programa integral de manejo y recuperación del Inka Naani es promovido por el Instituto de Montaña y apoyado por la Fundación Telefónica, que ha implementado en el lugar paneles, carteles y letreros de señalización.

El camino comienza en el puente de Pomachaca, que cruza el río Mosna. A lo largo del trayecto se aprecian escaleras, puentes, canaletas, drenajes y muros con tecnología inca y preínca. En el tramo comprendido entre Castillo y Colpa existe también una continua presencia de poblaciones, zonas agrícolas y de pastoreo.

Hay aproximadamente 12 centros poblados, de los cuales Castillo, Ayash y Colpa son los polos de atracción más fuertes, ya que por ellos pasa la carretera.

Entre sus atractivos destacan Soledad de Tambo, la primera parada en una caminata iniciada en Huari, donde las familias campesinas comparten con los visitantes su historia, el manejo de las chacras y su conocimiento de la ruta.

Aquí se encuentra una pirámide truncada con una abertura que habría recibido ofrendas durante las ceremonias incas. Otro punto interesante es el camino a San Cristóbal de Tambo, donde se pasará por una de las secciones más espectaculares del mismo.

El recorrido pasa también por un lago hermoso llamado Tinya y por otro tambo llamado Quinhuajirca. Posteriormente se llega a Taparaco, donde hay unos 70 recintos, y a la aldea San Lorenzo, que sobresale por sus quenuales.

Finalmente se llega al tambo real de la Pampa de Huánuco, conocido hoy en día como el sitio arqueológico de Huánuco Viejo. Este complejo era una capital provincial, y es quizás el sitio inca más grande fuera del departamento del Cusco.