La secuencia de fotos muestra a un grupo de rescatistas vestidos de amarillo nadando en el mar Egeo para rescatar a inmigrantes que llegaban desde Turquía a Grecia en un barco a punto de hundirse. De todas las imágenes, hubo una que recorrió el mundo: la del rescatista argentino que carga a un bebé.
Se llama Nicolás Migueiz Montán, quien viajó a la isla de Lesbos para colaborar con las tareas de rescate en el país helénico. En la imagen, aparece él sosteniendo a un bebé.
Si bien fue una de las experiencias que le provocó mayor conmoción, también es —según el argentino— una de las más satisfactorias comparado con las trágicas escenas que le ha tocado presenciar.
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“Terminó la temporada y quisimos venir para ver si servía dar una mano. Cuando llegamos acá, vimos que cuando arriba la barca se complicaba el desembarco porque nadie acercaba las barcas. Los inmigrantes vienen con chalecos salvavidas que son de muy mala calidad y se ahogaban a 50 o 100 metros de la costa”, describió Nicolás.
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Nicolás Migueiz tiene 34 años y es profesor de educación física. Trabaja desde hace 7 años en Barcelona como salvavidas. Pero cuando comenzó la crisis inmigratoria en las costas del mar Egeo, viajó junto a otros colegas para ayudar en los rescates organizados por la ONG Proactiva Open Arms.
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Los grupos para apoyar con las tareas de rescate trabajan sobre el terreno 15 días. Luego, son regresados a su lugar de origen y reemplazados por otros. Nicolás, Fiorella y Daniel están por cumplir el plazo. Ya cuando regresen tendrán ocasión de contar a sus familias lo que vivieron.
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