El nuevo rostro de Renée Zellweger, la recordada protagonista de _El Diario de Bridget Jones, causó sorpresa alrededor del mundo. Y es que nada queda de la dulce expresión de la actriz de 45 años, conocida por su participación en películas como Abajo el amor y Chicago.
Aunque a través de un comunicado la actriz ha asegurado que se siente “saludable” y que es normal cambiar de apariencia con el paso de los años, lo cierto es que ella no es la única que ha mostrado un cambio radical en su aspecto.
Algunas actrices como Nicole Kidman sometieron sus rostros a sesiones de bótox con pésimos resultados. La actriz australiana habló públicamente sobre el tema e indicó que cedió a la presión por lucir más joven y bella. “Fue un error, puedo decir que no he vuelto a usarlo y que lo que ven ahora es fruto de una vida sana”, dijo en junio último.
Otra artista que dejó atrás su otrora belleza natural fue Lara Flynn Boyle. La actriz, que protagonizó en su juventud la serie de culto Twin Peaks confesó en una ocasión que temía envejecer, según recogió el Daily Mail.
Destacan también las jóvenes Heidi Montag y Lindsay Lohan, quien a diferencia de las anteriores, alteraron su aspecto pese a su juventud. Lohan —conocida por sus excesos— y Montag tienen apenas 28 años.
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