A un mes de la filtración de varias fotografías íntimas suyas en Internet, Jennifer Lawrence habló por primera vez del tema en una entrevista exclusiva para Vanity Fair, revista para que la que había protagonizado una sesión de fotos dos semanas antes de que estallara el escándalo conocido como ‘Celebgate’.
La actriz de 24 años confesó que se encontraba muy asustada al enterarse de la difusión de estas imágenes y que no sabía cómo este hecho iba a afectar su carrera. Contó que una de sus primeras reacciones fue redactar un comunicado, pero que cada palabra que intentaba escribir la hacía llorar.
“Comencé escribiendo una disculpa, pero no encontraba nada por lo que pedir perdón. Yo estaba en una amorosa, saludable y gran relación de cuatro años (en aparente referencia a Nicholas Hoult). Estábamos separados por la distancia y era: o mi novio va a ver porno o me va a ver a mí”, declaró la protagonista de la saga de The Hunger Games.
La ganadora del Oscar condenó a los hackers por cometer un “crimen sexual” en su contra, pero también las páginas web que difundieron las imágenes y a aquellos que las vieron.
“Solo porque soy una figura pública, porque soy una actriz, no significa que busqué esto. No significa que esto viene en el paquete. Es mi cuerpo y debería ser elección que salgan o no este tipo de fotos y que haya pasado sin mi consentimiento es simplemente repugnante”, acotó.
Lawrence también calificó de “desconsiderado, insensible y vacío por dentro” al hacker que filtró sus fotos. “No puedo entender cómo alguien puede explotar y abusar sexualmente de otra persona y que su primer pensamiento sea sacar beneficio”.
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