El sol cae como un hachazo sobre el norte del país y, encima, las lluvias no dejan de causar muerte y destrucción.
Este martes, al aterrizar en el distrito de Casitas, provincia de Contralmirante Villar (Tumbes), el alcalde de la jurisdicción, Rodrigo Merino, informó a la prensa sobre la desaparición de un morador de la localidad de El Cañaveral debido a la activación de una quebrada.
“Hace seis días, Jesús Atoche Marchand (19) estaba ayudando a rescatar a personas aisladas por las inundaciones, cuando un huaico lo arrastró. Desde ese momento no sabemos nada de él”, sostuvo el burgomaestre, quien agregó que en Casitas hay 5 mil afectados por los aguaceros y desbordes de ríos.
Al respecto, el ministro de Defensa, Jorge Nieto Montesinos, quien llegó a la zona para instalar un hospital de campaña con el fin de evitar que se propaguen enfermedades como el mortal dengue, dijo que se harán todos los esfuerzos posibles, por aire y tierra, para ubicar al desaparecido.
PIURA SUFRE
Con la misma aeronave que llegamos a Tumbes , fuimos a Piura para conocer los estragos que las precipitaciones han dejado en la localidad de Gibito, en el distrito de Miguel Checa, provincia de Sullana, que ha quedado aislada por la inundación y destrucción de la vía que la conecta con el resto de la región. Aquí los daños en las casas y calles se han ido borrando poco a poco por el apoyo de la compañía de intervención rápida del Ejército. El gobernador regional de Piura, Reynaldo Hilbck, por su parte, manifestó que lo que urge en su departamento es maquinaria pesada para despejar las carreteras. Wilfredo Rodríguez, de la Gerencia Regional de Infraestructura, denunció que 85 unidades de maquinaria pesada del Ministerio de Vivienda no pueden intervenir en zonas rurales por un tema burocrático. “Eso evita una rápida reparación de la destrucción”, acotó.
RESPONSABILIDAD DE TODOS
Sobre la situación de destrucción en ambas regiones, el ministro Nieto Montesinos sostuvo que el Gobierno Central está enfrentando una emergencia, que es la consecuencia de un desarrollo urbano inadecuado, de falta de equipamiento y obras que se debieron hacer. También dijo que se está pagando la ineficiencia en las instituciones en diversos niveles de gobierno.
“Entonces, hoy día estamos enfrentando una emergencia, acumulando un conjunto de descuidos de años y años. Somos un desastre”, enfatizó luego de coordinar con las autoridades regionales la ayuda a los damnificados.
“Cuando dije que somos un desastre, he usado el plural adrede, me incluyo en él, porque creo que todos tenemos responsabilidad en esta situación”, concluyó.
DATOS
- Este año, a nivel nacional, las lluvias han dejado 29 muertos, 45 heridos y ocho desaparecidos.
- También se han contabilizado 4,790 casas colapsadas, 86,197 afectadas, 5,477 inhabitables y 1,635 kilómetros de carreteras dañados.
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