Lo ‘chic’ está en mostrar la personalidad

Por Carlos Chávarry

Pret a porter quiere decir ‘listo para usar’. Es la categoría que se encarga de la producción de modelos en serie. El brasileño Dos Santos nos habla del tema.

Chanel decía que era muy fácil hacer un vestido Scherezade, pero que era muy difícil hacer un vestido simple.
Exacto. En realidad lo chic está en la simplicidad y que uno pueda demostrar su personalidad. A eso se refiere Chanel: crear lo extravagante es lo más fácil del mundo, pero crear algo elegante con simplicidad exige inteligencia.

¿Cómo se define el mal gusto?
Es cuando pecas de exageración: si tú tienes dudas acerca de los detalles estéticos de tu creación, entonces mejor la retiras. El mal gusto surge, precisamente, con la falta de educación y la falta de contacto con las otras personas: el no entender los hábitos y comportamientos de los demás.

¿Quién decide una tendencia?
Antes las industrias de tejidos y tintes eran las que marcaban las tendencias. Pero ahora son los mismos consumidores quienes generan las tendencias a partir de movimientos sociales. Entonces, las principales marcas se preocupan en sintonizar.

¿Qué movimientos sociales?
Las tendencias se relacionan a un momento específico, a un país, a una economía. La India sirve de doble inspiración: tiene palacios y maharajás, pero también está la sencillez del vestido de los pobres y la cultura de las flores. Nos fijamos en países en los que está ocurriendo algo. No es casualidad que la ropa de camuflaje para vestir en la calle aparezca en momentos en que se vive alguna guerra.

Es una forma más real de asumir el mundo, ¿no?
Sí, porque ya se dieron cuenta de que diseñar una fantasía no tiene mucho sentido. Además, porque hoy el mundo está mucho más pobre que antes. Y aun así, la paradoja es que siendo pobre, la gente busca consumir cada vez más.

¿Pero adinerados y los que no lo son necesitan de la moda?
Sí, el ser humano tiene una personalidad y necesita proyectarla. Y eso viene desde los tiempos prehistóricos. La moda es una fábrica de sueños y si tú no sueñas con algo, en el día a día, es muy triste. Pero también debemos de sacarnos la vieja creencia de que la moda es solo un fenómeno del vestido cotidiano. Es todo un estilo de vida.

En EE.UU. la gente pone en aprietos a las grandes marcas.
Vestirse como en una revista de modas está fuera de foco. Antes las grandes marcas buscaban uniformizar, que todo el mundo se vistiera igual. Hoy lo importante es utilizar la moda para demostrar su personalidad y no ser más un ‘fashion-victim’. Vivimos en una época en la que el cliente está cansado de ser dirigido en todos los sentidos.

¿Cómo ve la moda en el Perú?
Hay una importante tradición textil ancestral. Tienen el algodón pima, lana de alpaca –una maravilla–, y todas las técnicas de tejido y bordado. Pero esta tradición debería acompañarse de una visión. No se trata de diseñar piezas folklóricas, sino de equilibrar el lado artesanal con lo contemporáneo.