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Invasores de tierras amenazan líneas de Nazca en Perú

Domingo 23 de octubre del 2005 | 12:00

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NAZCA, Perú, oct 23 (Reuters) - Un pequeño cartel pintado a mano y puesto sobre una débil cerca de púas advierte a los visitantes de las líneas de Nazca: "No entrar, zona intangible." No es un gran impedimento.

La última amenaza para la extensa zona, declarada patrimonio cultural mundial por la ONU y donde las líneas enigmáticas y figuras estilizadas de aves y animales fueron dibujadas hace unos 2.000 años, es la aparición en agosto de un campamento de unas 30 chozas.

Las rudimentarias chozas de paja se han colocado en el borde de un área protegida que cubre 450 kilómetros cuadrados, dos veces y medio el tamaño de Washington DC. Abajo hay un antiguo cementerio y en el suelo se ven los hoyos dejados por las escavaciones de los traficantes de piezas arqueológicas.

Las líneas, una de las mayores atracciones turísticas de Perú pero que sólo es totalmente visibles desde el aire, fueron hechas limpiando las piedritas sobre la superficie del desierto o colocándolas sobre otras cuando aún existía el imperio romano.

Pero se ve que vándalos modernos han hecho su trabajo.

Un trapezoide gigante, que no está en la típica ruta aérea tomada por los turistas, está cubierto de garabatos.

Cerca de zona alguien también ha dibujado un pene, una adición reciente juzgando por cómo la tierra removida se ve clara contra el gris de la pampa.

"Todo el mundo piensa que estamos exagerando cuando decimos que las líneas están siendo dañadas irremediablemente, pero me gustaría que se viera la cantidad de grafitis en las líneas", dijo Eduardo Herrán, jefe de pilotos de Aerocondor, quien vuela casi a diario sobre Nazca.

Los invasores, que fueron denunciados a la policía pero dicen que no tener a dónde ir, se ubican al lado de otra invasión más vieja que ahora está tan establecida que hasta tiene una cancha de fútbol hecha de cemento.

Lo irónico es que están frente a la casa de la matemática alemana María Reiche, quien fue llamada la "dama de las líneas" porque dedicó su vida a estudiarlas y protegerlas.

Aunque los invasores están lejos de las más enblemáticas figuras de Nazca, como el mono con cola de espiral, arqueólogos temen que las ocupaciones sigan si la gente no es desalojada.

"Todo esto es intangible (...) está lleno de excremento, basura, huaquería", dijo el invasor Maximiliano Tenorio.

SIEMPRE MAS URGENTE

El saqueo de tumbas sigue siendo una de las mayores amenazas en Nazca. Desde el aire parece que algunas áreas llevan impactos de una ametralladora por la cantidad de huecos hechos en décadas a la caza de cerámicas, textiles y joyas.

Herrán dijo que un textil de la civilización Paracas, cuando se hicieron las más antiguas líneas en Nazca y las vecinas de Palpa, podría costar un millón de dólares.

La cultura Paracas se desarrolló entre los años 500 y 200 antes de Cristo y Nazca entre el año 100 antes de Cristo y el año 650 después de Cristo.

Entre otros peligros, Herrán dijo que había visto huellas de chivos a unos 10 metros de la cabeza de la famosa figura del colibrí.

La protección de las líneas, que se han interpretado como un calendario agrario, pista de aterrizaje para ovnis o ligado a la fertilidad o el agua, es cada vez más urgente debido a que se están descubriendo más riquezas arqueológicas.

Por ejemplo en septiembre se hallaron unas figuras, dos con formas de monos y otra con forma de pescado o serpiente, hasta ahora mayormente desconocidas.

"Todo lo que ha sido conservado por el desierto y ahora el hombre lo está destruyendo con la agricultura, con la expansión de viviendas y la depredación de los lugares arqueológicos", afirmó el arqueólogo italiano Guiseppe Orefici, que trabaja en Nazca y las pirámides ceremoniales Cahuachi.

TESOROS DONDE PISE

Las líneas de Nazca recién fueron declaradas patrimonio de la humanidad por las Naciones Unidas en 1994, seis décadas después que la figura de un lagarto fuera partida en dos por la construcción de la carretera Panamericana.

Otros daños ocurrieron más adelante cuando torres de electricidad fueron colocadas cerca de por lo menos una figura.

"Donde se pise en Nazca hay evidencias arqueológicas, restos de cementerios y también líneas", dijo el historiador Josue Lancho.

Y sólo pisar es problemático. La superficie del desierto está cubierta por piedritas pero la tierra debajo es muy esponjosa, lo que hace las huellas más leves casi indelebles.

Por ello las líneas de Nazca y Palpa han sobrevivido casi intactas por unos 2.000 años. Pero, es también por ello que las huellas de llantas de hace medio siglo son parte del paisaje.

Helaine Silverman, una autoridad sobre Nazca de la universidad de Illinois dijo que se debe hacer más por las líneas. Las autoridades "justifican que tienen carencia de fondos pero realmente es una carencia de voluntad".

Sólo un par de vigilantes en motocicleta cuida las líneas de Nazca. Uno de ellos, Humberto Cancho, dijo que había encontrado un camión descargando basura en la zona protegida y que los autobuses interprovinciales arrojan desechos ahí.

El arqueólogo Johny Isla, dijo que la gente parecía haber empezado a cuidar más en Nazca, pero que en Palpa, zona aún no protegida, las cosas siguen críticas.

Allá las líneas están en laderas con un barrio pobre que se acerca cada vez más y algunas líneas han sido dañadas por gente que sube a verlas.

"Lo clásico es escribir nombres (en las laderas). Ahora no hay muchas laderas sin tocar", explicó el arqueólogo.