El régimen de Barack Obama enviará hasta 1,200 soldados adicionales a la frontera con México para luchar contra el narcotráfico y la inmigración ilegal. Según informó la secretaria de Seguridad Interior, Janet Napolitano, esto se iniciará desde el 1 de agosto próximo.
Para setiembre “deberíamos tener a todos nuestros soldados ya en el terreno”, donde permanecerán por un año mientras el gobierno de Obama contrata nuevos agentes para la Patrulla Fronteriza, indicó el comandante de la Guardia Nacional, general Craig McKinley, en rueda de prensa.
“Estos soldados proveerán apoyo a los agentes federales que trabajan en áreas de alto riesgo para combatir organizaciones criminales que buscan introducir personas y bienes ilegalmente por la frontera Sur”, dijo Napolitano.
Los soldados actuarán estrictamente bajo órdenes de las agencias de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) y la de Aduanas e Inmigración (ICE), y no tendrán una función directa en la aplicación de las leyes, que corresponde a autoridades civiles, dijo McKinley.