La cantante estadounidense pop del momento, Beyoncé, se embolsó la friolera suma de unos 2 millones de dólares por ofrecer un concierto privado en un fiesta de fin de año del hijo del líder libio, Muammar al-Gaddafi, informó el tabloide británico “Daily Mail”.
Según este medio, el concierto duró apenas una hora y durante ese tiempo, la diva no dejó de mover las caderas y de poner en pie a los invitados de Mutasim Billah, tercer hijo del jefe de Estado libio. Beyoncé estuvo acompañada por su esposo, el rapero Jay-Z.
En el show privado también estuvo presente Lindsay Lohan y el artista estadounidense Usher. La diosa de ébano ahora se prepara para el concierto que ofrecerá en Lima, el 16 de febrero.